sábado, 2 de marzo de 2013

Ángel de mi Guarda.

 
Nos conocimos desde niños, no sé exactamente cuando, en serio que está todo muy borroso para mí. Sólo recuerdo que de niños solíamos jugar en las fiestas. Yo siempre era muy calladita; así que tú solías estar jugando con "los primos", mientras yo estaba sentada, solita, hablando sólo con mi mamá, o haciendo alguna otra cosa.
Pero cuando se hacía más tarde, las cosas cambiaban. Todos los niños de nuestra edad se dormían, sólo quedábamos los dos. Ahí era nuestro momento, hablábamos muchísimo. Recuerdo claramente que te enseñé a hacer "gusanitos de papel", además me contabas de tus amigos, nos reíamos de las cosas que solía decir mi hermano, y nos pasábamos horas sonriendo y divirtiéndonos.

Luego, durante todo el tiempo que yo estuve viviendo lejos, nos vimos muy poco, con la excepción de esa vez que fuiste a visitar a mi familia con tu mamá. Recuerdo cuando fuimos al club, y jugamos taco. Te reíste de mí porque yo era una experta, y tú no, aunque yo era chica. ¿Cuántos años teníamos? ¿10? Aún no sabíamos mucho de la vida.

Después, a los 12 años fuimos a la capital, con nuestras mamás. Recuerdo que visitamos un museo con muchos muñequitos de Star Wars. Además, en ese viaje, tú que amabas leer, me enseñaste los famosos libros de Harry Potter, en la época que aún nadie pensaba que harían una película de ellos. 
Nunca olvido que en ese viaje, acompañados de tu walkman rojo, descubrimos que te encantaban los prisioneros, y esa canción pegadiza, que no recuerdo cómo se llama. 

Recuerdo también cuando fuimos a la playa. Eso es lo que más recuerdo, porqué todas las noches nos pasamos conversando, al regresar a la casa. Lo chistoso era que durante el día, te ibas con mi hermano, a "pescar" chicas, y decías que sí te veían conmigo, te las iba a espantar. Pero apenas llegábamos a la casa, nos quedábamos conversando hasta tarde, poníamos música y nos reíamos de las cosas que decíamos.
Ahí fue cuando me dijiste, que no entendías porqué en el colegio había necesidad de pelear, me dijiste que sí tu tuvieras que pelear con alguien en el colegio, escogerías al más flaquito, para ganarle rápido y que termine la pelea.

Pasaron años, y seguíamos saliendo juntos, íbamos a fiestas, con mi hermano, y con los otros primos. Mis amigas se volvieron insoportables en el colegio, todo el tiempo pidiéndome que te las presente, y molestándome por que eras muy guapo. 
Las cosas se pusieron peores cuando fuiste mi "paje" en mis quince años, pues mis amigas no podían más, apenas te vieron, comenzaron a preguntarme por ti. Y  tú no te quedabas atrás y les hablabas a todas. Cómo te gustaban las chicas, eras un coqueto.

Siempre pude hablar contigo, de todo. Fuiste siempre muy inteligente, solíamos hablar de libros; ya que a ti, te encantaba leer lo que sea que llegara a tus manos. En matemáticas, también eras excelente. Un día me pediste que te ayudara en tu tarea; pero, ni siquiera fue necesario, sabías y entendías todo. No sólo eras guapo, sino inteligente, gracioso, todo. Hasta hoy, en las reuniones familiares, nos reímos con tus chistes, y como los contabas, era muy divertido. Eras muy divertido.

Hoy, 2 de marzo, se cumplen 2 años ya, desde que te fuiste, y te convertiste en mi ángel de la guarda personal, y no hay día que no me acuerde  de ti. No hay momento que no te extrañe. Cuando fui a la playa este año, sólo me la pasé recordándote.
Sé que me das tu "ayudita" cuando las cosas se complican, créeme que lo sé, y siempre te lo agradezco, y te dejo alguno que otro mensaje en facebook, nunca te olvido.

Te quiero, te amo, te extraño.

2 comentarios:

  1. Mujer !!
    Demasiado lindo, demasiado sincero, demasiado perfecto.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias! Es muy sincero, y vino del fondo de mi corazón, ahí, ese lugar sólo habitado por personitas especiales.

      Eliminar